El otro día, por fin en la recta final de mis obligaciones estudiantiles 🙂 , me puse a pensar todas las cosas que tenía que hacer con Amy. Una de ellas era bañarla que ya llevaba un mes o un poco más sin pasar por la ducha y yo la baño cada poco porque duerme conmigo, sube al sofá… Y me parece importante mantener unas condiciones higiénicas. Eso sí, intento usar champús poco agresivos y de pH neutro (¡ya os hablé de la importancia de esto en otra entrada!) para que esta frecuencia alta de lavados no le haga mal.
Ya he hablado más veces del baño de Amy e hice un pequeño tutorial contando cómo la bañaba que podéis ver en el mismo blog aquí. Pero esta vez me apetecía probar algo nuevo y decidimos ir a un autolavado para perros. Seguir leyendo «Autolavado para perros»